La región Île-de-France cuenta ahora con 50 bosques estatales, que representan 72.500 hectáreas de bosques. Acogen por sus senderos a muchas familias, excursionistas, ciclistas, escaladores, poetas, paseantes y artistas. También se organizan regularmente eventos culturales. Es posible descubrir 148 sitios culturales, algunos de los cuales están clasificados como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, como el Château de Fontainebleau.
El bosque de Rambouillet
© HUTTOPIA
A tan sólo 60 kilómetros de la capital se encuentra el excepcional bosque de Rambouillet, apreciado por toda Francia por sus numerosos senderos de paseo, y la riqueza de su flora y fauna. 14.000 hectáreas son administradas por el Office national des forêts, encargado de asegurar una calidad ambiental preservada y sostenible, para poder ofrecerles a sus visitantes un momento de relajación en sintonía con la naturaleza. Familias, grupos de amigos, aficionados de deportes, fotógrafos y ciclistas pueden aprovechar los 92 km de senderos y los 60 km de carriles bici.
El Espace Rambouillet, un parque forestal y de animales en medio del bosque, acoge a familias y grupos de amigos. Aquí es posible observar ciervos, corzos, gamos y jabalíes en su entorno natural, sin ninguna barrera. En el corazón del Bosque de las Águilas, el parque ofrece una experiencia excepcional: un recorrido inmersivo por el mundo de las aves y una exhibición de vuelo libre de rapaces para ayudar a los visitantes a comprender su ecología. Por último, pequeños y mayores pueden saltar y rebotar como una ardilla en los trampolines gigantes suspendidos en los árboles.
Transporte: tome la línea N transilien desde la Estación Paris-Montparnasse, dirección Rambouillet/Chartres, o dirección Dreux, hasta la Gare de Rambouillet.
El bosque de Fontainebleau
© Fontainebleau Tourisme
Conocido por su palacio, el bosque de Fontainebleau está lleno de preciosas sorpresas, para jóvenes y mayores, deportistas, historiadores, artistas o simplemente paseantes. Es un lugar de encuentro para los fotógrafos que saben sublimar sus amplios paisajes y su excepcional flora: ¡cuenta con 5685 especies de plantas! Sus 25.000 hectáreas lo convierten en el mayor bosque estatal de Île-de-France: encuentra mucho éxito entre los habitantes de Île-de-France, a quienes les gusta combinar el disfrutar del patrimonio cultural y natural. El caos rocoso del bosque de Fontainebleau lo hace especial: atrae a muchos aficionados de escalada, que pueden disfrutar todos los días de su actividad en un pintoresco paisaje.
Además de ser un ineludible lugar de encuentro para los escaladores, el bosque de Fontainebleau también alberga otras insólitas iniciativas. Los paseos en karts con perros de trineo, generalmente reservados para destinos nevados, atraen a los niños en busca de aventuras deportivas. Por supuesto, se recomienda especialmente una visita al Palacio de Fontainebleau: construido entre los siglos XVI y XVIII, es una verdadera joya del patrimonio cultural francés, a un paso de la capital.
En transporte: Desde París Gare de Lyon, tomar la línea R dirección Montargis hasta Bois Le Roi (para acceder al norte del bosque), o hasta Montigny le Loing (para acceder al sur del bosque).
El bosque de Meudon
© CDT92
La región Ile-de-France es un verdadero pulmón verde que abunda en bosques, formando un excepcional patrimonio. Esto les permite a los parisinos y residentes de l’Ile-de-France disfrutar de insólitas actividades, o simplemente de tomarse el tiempo de alejarse durante unas horas del ajetreo de la vida urbana. El Bosque de Meudon es el más cercano a París, y el más grande del departamento de Hauts-de-Seine. Los excursionistas pueden disfrutar de los 16,5 km de senderos, mientras pintores y paseantes pueden pasmarse con los numerosos juncos y nenúfares, garzas, coipos o cormoranes. El bosque de Meudon también tiene la suerte de haber conservado rastros del período neolítico, como lo demuestra el famoso menhir "Pierre aux Moines" que puede admirarse.
Bosque estatal de Montmorency
Además de los 30 km de senderos que el excepcional bosque de Montmorency ofrece a los excursionistas, también es posible disfrutarlo visitando el Château de la Chasse (Palacio de la Caza), situado en su corazón. Catalogado como monumento histórico, acogió a muchos reyes franceses que se alojaban allí para ir a cazar una fauna que sigue siendo, hoy en dia, muy abundante. El Chemin du Philosophe (Camino del Filósofo) es un sendero del bosque, que permite a los que lo recorren recargar baterías aprovechando de encuentros filosóficos y de talleres de meditación.
Bosque de Armainvilliers
Situado en Seine-et-Marne, el bosque de Armainvilliers es conocido por ser un territorio fértil, favorable al crecimiento de los robles sésiles. Interminables senderos de robles y otros árboles caducifolios que rodean los senderos del bosque, sumergen a los excursionistas y ciclistas por un sueño despierto: ¡cambio de ambiente garantizado!
Bosque de Marly
Verdadero lugar de encuentro para los corredores, el bosque de Marly también se esfuerza por conservar excepcionales elementos patrimoniales: el telégrafo de Chappe, el Pont Tournant, o el Fort du Trou d’Enfer son espacios abiertos al público durante todo el año. Este bosque fue también un templo de inspiración para los pintores impresionistas franceses y europeos, como Corot, Sisley o Pissaro, que aprovecharon la tranquila y abundante flora del bosque de Marly para crear algunas de sus más bellas obras. L'école de la campagne et de la forêt es una organización que ofrece divertidos y educativos talleres para que jóvenes y mayores descubran la fauna y la flora del bosque.
Descubra los bosques de la región de Île-de-France en un recorrido por las Traversées, donde podrá descubrir rincones ocultos y aprender sobre botánica, geología e historia del paisaje.