Bordeado por la plaza Alberto Giacometti, este callejón adoquinado y florido invita a pasear por sus casitas con jardines. En el número 19, se puede admirar una sorprendente reja de madera y hierro forjado, con dos grandes corazones incrustados. Fue realizada por el escultor húngaro Alexandre Mezei, que vivió allí en la década de 1950. Se puede alargar el paseo tomando la bucólica Rue des Thermopyles.