© Robin Cambianica
Lejos de los recorridos típicos, hay rincones más secretos y menos turísticos que también conforman la magia de París. El encanto de las casas de campo de la calle Butte-aux-Cailles, detrás de la Place d’Italie, o los pasajes verdes cerca del Parque Montsouris...
Una viña inopinada en las laderas de Montmartre que se vendimia cada año. Escalofríos a 20 m bajo tierra a lo largo de las históricas catacumbas. Tesoros de los múltiples pasadizos cubiertos por los que darse un maravilloso paseo.
Estos remansos de paz, habitualmente declarados patrimonio de la ciudad, también son símbolos de un arte de vivir muy parisino: profusa decoración y preciosos escaparates iluminados por la luz natural que filtran las vidrieras. Le indicamos un sinfín de sugerencias en los paseos que proponemos. Detallamos las visitas insólitas en las fichas de los establecimientos correspondientes.
El hipódromo favorito de los profesionales
Dominando el oeste de París, el hipódromo de Saint-Cloud ofrece …
