¿Cómo se convierte una sala en un mito? Porque resiste a todo, porque ha visto pasar a los más grandes o porque ha servido de trampolín a tal o tal estrella. Nos gusta por la emoción que desprende el lugar y los recuerdos que lleva. Salas de conciertos, teatros, son los ineludibles de la capital, ya que siempre está pasando algo.